IA visión estratégica a futuro
Este texto explora las distintas visiones sobre el desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) entre Estados Unidos y China, destacando cómo cada nación persigue objetivos y aplicaciones diferentes. Mientras Estados Unidos se enfoca en la innovación impulsada por el mercado y los grandes modelos de lenguaje (LLM) para servicios, China prioriza la IA para la manufactura, la robótica industrial y usos militares, ofreciendo soluciones de bajo costo a países en desarrollo. Comprender estas diferencias es crucial para analizar el "Gran Panorama" de la IA, abarcando sus impactos económicos, políticos, sociales, militares y ambientales, y subraya la importancia de un uso ético, pensamiento crítico y un enfoque humanista al moldear el futuro de esta tecnología.
Texto curado por ACG con ayuda de NotebookLM en base al artículo analizado.
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A: Visiones de Futuro entre EE. UU. y China
Gran palabrería lingüística: las declaraciones de visión de la inteligencia artificial comercial entre Estados Unidos y China
China reconoce que la IA es mucho más que chatbots
por: Steven Frank
4 minutos de lectura
publicado el 29 de Agosto de 2025 en Medium.com
documento original: https://medium.com/policy-panorama/large-language-twaddle-the-u-s-and-china-trade-ai-vision-statements-5a242730cef5
Los planes de acción rivales en materia de inteligencia artificial (IA), publicados casi simultáneamente el mes pasado por Estados Unidos y China, cuentan historias muy diferentes. El plan estadounidense, de tono grandilocuente, se basa en el dominio tecnológico y la innovación impulsada por el mercado. Su enfoque principal es ganar la carrera ampliando las ventajas existentes. El plan chino, mucho más breve, promete cooperación, inclusión y desarrollo compartido, presentando a China como un líder responsable en la gobernanza global de la IA. Dejando de lado las posturas y los clichés, ¿qué plan tiene más probabilidades de éxito?
Reconociendo el potencial de la IA para llegar a todos los ámbitos de la vida, desde el trabajo tal como lo conocemos hasta el poderío militar, ambos países la ven como una herramienta económica y política cada vez más crucial. Pero la IA no es una tecnología monolítica. Sí, la IA abarca grandes modelos de lenguaje (LLM) como Gemini y ChatGPT, así como sistemas que generan imágenes, vídeos y música a pedido. También abarca la automatización de fábricas, la robótica, la vigilancia, la criptografía y los grandes centros de datos que respaldan el entrenamiento de la IA y la implementación en la nube.
Estados Unidos domina el diseño avanzado de chips semiconductores y ha limitado el acceso de China a los procesadores más potentes diseñados para IA. Sin embargo, China se ha ido recuperando, y el pasado enero, la startup china DeepSeek sorprendió a los mercados globales al desafiar directamente a los gigantes estadounidenses de la IA —OpenAI, Google, Anthropic, X y Meta— con un LLM de vanguardia, entrenado con procesadores de IA de segunda línea y con un presupuesto modesto. Esto bastó para sacar un billón de dólares de la bolsa estadounidense en un solo día.
No obstante, los gigantes de la IA siguen presumiendo de valoraciones altísimas. Actualmente, todos generan ingresos con ofertas premium: las suscripciones de consumo representan alrededor del 75 % de los ingresos de OpenAI, por ejemplo. Sin embargo, solo el 1,6 % de los usuarios activos semanales son suscriptores de pago. Los gigantes apuestan a que esta cifra aumentará a medida que los chatbots se conviertan en asistentes autónomos que no solo responden preguntas, sino que también planifican itinerarios, hacen reservas y aprenden de tus hábitos. Con capital para financiar nuevos centros de datos masivos y salarios exorbitantes para tecnólogos estrella, los gigantes creen que pueden superar a cualquier rival y, al mismo tiempo, coexistir en un mercado en rápida expansión y casi infinito.
Esto sitúa a los gigantes en una posición privilegiada para la economía estadounidense. Como economía basada en servicios, Estados Unidos depende en gran medida del sector del software y las tecnologías de la información para impulsar el crecimiento y la productividad. La economía digital, que incluye el software, ha superado sistemáticamente el crecimiento del producto interior bruto (PIB) estadounidense.
China, en cambio, es un gigante manufacturero con un sector de servicios reducido. No puede aspirar a competir con los gigantes tecnológicos estadounidenses ni tiene interés en hacerlo. Con su iniciativa "Hecho en China 2025", China espera extender su dominio manufacturero desde bienes de consumo de bajo coste a productos más sofisticados como robots, vehículos eléctricos y chips. La IA aplicada a las plantas de producción es esencial para esta transformación; los LLM no lo son.
Las ambiciones industriales de China incluyen la fabricación de equipo y armas militares. La guerra en Ucrania, donde enjambres de drones baratos detienen avances blindados masivos y diezman incluso pequeñas concentraciones de tropas, ha validado la dependencia histórica de China de la cantidad sobre la calidad de vanguardia. China ahora puede construir más buques de guerra en un mes que Estados Unidos en un año. Según se informa , está produciendo sistemas de armas y municiones de alta gama a un ritmo cinco o seis veces más rápido que Estados Unidos. Mientras contempla la reunificación con Taiwán, por la fuerza si es necesario, China observa la rapidez con la que el aumento de armas de Estados Unidos a Ucrania e Israel ha agotado los inventarios y superado su capacidad de reemplazo. Estados Unidos puede tener los mejores LLM, pero los chatbots no ganan guerras.
Cuando China proclama su compromiso con el desarrollo de capacidades internacionales en IA, piensa en su iniciativa neomercantil de la Franja y la Ruta, que compra la dependencia económica y política de los países en desarrollo. Los centros de datos son infraestructura, al igual que las presas y los puertos. La oferta china de soluciones de IA accesibles y rentables, y su promesa de ayudar a reducir la brecha digital, podrían convertirla en un socio atractivo, integrando la tecnología china en las economías de todo el mundo. El temor al espionaje o a las interrupciones ha llevado a muchos países avanzados a prohibir o restringir drásticamente la compra de equipos de red a proveedores chinos de alto riesgo, como Huawei y ZTE. Los beneficiarios de la Franja y la Ruta podrían ser menos exigentes.
La IA sustenta el liderazgo tecnológico de China en tecnología de vigilancia, automatización de fábricas y capacidad industrial militar. No le importa si EE. UU. amplía su liderazgo en tecnología de chatbots, ya que está en una carrera diferente. Si China logra fomentar el desarrollo local de LLM "suficientemente buenos" a bajo costo, satisfará las necesidades nacionales de productividad y gubernamentales, y seguirá pisando los talones a los gigantes estadounidenses.
¿Confiaría en ChatGPT para administrar sus finanzas y tomar decisiones sobre tratamientos médicos por usted, y mucho menos pagar por ellos?
China cree que prefieres generar electricidad, conducir vehículos de bajo coste y ganar guerras.
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Panorama de Políticas es un espacio para debatir las leyes, los sistemas y las normas que impactan nuestras vidas y el planeta. Invitamos a debatir concienzudamente sobre políticas públicas y temas relacionados en todos los niveles, desde el internacional hasta el local.
Escrito por Steven Frank
Steven Frank es el fundador de MedAEye Technologies, que desarrolla sistemas de IA que ayudan a los médicos a detectar enfermedades en imágenes médicas.
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La Iniciativa de la Franja y la Ruta (conocida como BRI, por sus siglas en inglés) es un ambicioso proyecto global de desarrollo e inversión en infraestructura lanzado por China. Su objetivo principal es fortalecer la conectividad económica y el comercio entre China y otros países de Asia, Europa y África, a través de una vasta red de proyectos terrestres y marítimos.
Resumen Ejecutivo
¿Qué es?: La BRI es una estrategia de desarrollo global liderada por el gobierno chino que busca construir una red de infraestructura (carreteras, ferrocarriles, puertos, aeropuertos y redes energéticas) y fortalecer los lazos económicos y culturales. Abarca dos componentes principales:
El "Cinturón": Se refiere al "Cinturón Económico de la Ruta de la Seda", que se enfoca en proyectos terrestres y corredores económicos.
La "Ruta": Se refiere a la "Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI", que se centra en puertos y rutas de navegación.
Con licencia de Google
¿Quién la creó y cuándo?: La iniciativa fue lanzada por el presidente de China, Xi Jinping, en 2013, durante discursos en Kazajistán e Indonesia. Fue concebida como uno de los proyectos de política exterior más importantes de su gobierno.
¿Por qué se creó?: La BRI se creó por diversas razones, tanto internas como externas, que incluyen:
Proyección de poder económico: Aumentar la influencia económica y política de China en el mundo al crear nuevos mercados para sus productos y canalizar su exceso de capacidad industrial (especialmente en sectores como el cemento y el acero).
Necesidades internas: Abordar el desequilibrio de desarrollo entre las prósperas regiones costeras de China y las menos desarrolladas del interior, impulsando el crecimiento en estas últimas.
Diversificación de rutas comerciales: Reducir la dependencia de China de rutas marítimas controladas por otras potencias (como el Estrecho de Malaca) y crear vías de comercio más seguras.
Geopolítica: Fortalecer los lazos con los países vecinos y expandir la influencia de China en regiones estratégicas de Asia, África y América Latina, lo que ha generado preocupación en Occidente sobre la diplomacia de la "trampa de la deuda".
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